¿Cómo hacer mantequilla de cannabis CBD?

¿Quieres disfrutar de los beneficios del CBD de otra forma que no sea en aceite o flores? La mantequilla de CBD, también conocida como mantequilla de Marrakech, es la receta sencilla y deliciosa que necesitas. Al infusionar cáñamo legal en mantequilla, obtienes una base sabrosa, ideal para cocinar o preparar repostería con suavidad. Descubre cómo preparar esta mantequilla infusionada casera, rica en sabor y en beneficios naturales.

El secreto de la mantequilla de Marrakech con CBD

El CBD, o cannabidiol, es una molécula naturalmente lipófila, es decir, que se une fácilmente a las grasas. Esta propiedad convierte a la mantequilla en un soporte ideal para infusionarlo. Al fijarse en los lípidos, el CBD se absorbe mejor por el organismo, lo que mejora considerablemente su biodisponibilidad y, por tanto, sus efectos.

Por eso, la mantequilla de Marrakech con CBD es la base perfecta para la cocina con cáñamo. Puede utilizarse en numerosas recetas culinarias o de repostería —pasteles, bizcochos, galletas o salsas—, o simplemente untada sobre una tostada o mezclada en una bebida caliente para una infusión suave y eficaz.

Gracias a su textura cremosa y su riqueza en grasas, la mantequilla de CBD no solo conserva los aromas del cáñamo, sino que también optimiza la absorción del cannabidiol aportando un toque gourmet en cada uso.

Receta de mantequilla de Marrakech con CBD

Información

Tiempo total: 3 horas
Ingredientes principales: mantequilla, flores de CBD, agua
Nivel: fácil
Efectos buscados: relajación, equilibrio, bienestar

Ingredientes para unos 250 g de mantequilla

10 g de flores de CBD (o de cannabis según la legislación)
250 g de mantequilla sin sal o clarificada
500 ml de agua
1 cazo de fondo grueso
1 filtro de café, paño limpio o infusor
1 frasco hermético para conservar

1. Descarboxilar las flores de CBD

Antes de infusionar las flores de CBD en la mantequilla, hay que calentarlas suavemente para activar sus principios activos. Este paso, llamado descarboxilación, permite que el calor active los cannabinoides presentes de forma natural en el cáñamo, como el CBD.

Precalienta el horno a 110 °C, desmenuza las flores y extiéndelas sobre una bandeja cubierta con papel de hornear. Déjalas calentar entre 35 y 40 minutos, removiendo a mitad de cocción para un calentamiento uniforme.

Una vez fuera del horno, déjalas enfriar unos minutos. Tus flores ya están activadas y listas para liberar todo su potencial al ser infusionadas en la mantequilla.

2. Infusionar el CBD en la mantequilla

Derrite lentamente la mantequilla con el agua en una cacerola a fuego muy bajo. Cuando la mantequilla esté completamente líquida, añade las flores descarboxiladas y deja infusionar entre dos y tres horas, sin que llegue nunca a hervir.

El agua evita que la mantequilla se queme y favorece una extracción progresiva del cannabidiol. Remueve regularmente para mantener una infusión homogénea.

Si tienes un infusor, puedes colocar las flores dentro antes de sumergirlas en la mezcla de mantequilla y agua. Esto facilita el filtrado y mantiene la calidad de la extracción del CBD.

3. Filtrar y dejar endurecer

Una vez terminada la infusión, retira la cacerola del fuego y deja reposar unos minutos. Luego vierte el contenido a través de un paño limpio o un filtro de café para eliminar los restos vegetales.

Transfiere el líquido filtrado a un recipiente de vidrio y deja que se enfríe a temperatura ambiente. Después, colócalo en el refrigerador durante toda la noche. La mantequilla se solidificará de forma natural, separando la grasa del agua.

Al día siguiente, retira la parte acuosa. Te quedará una mantequilla de CBD concentrada y lista para usar.

4. Conservar y usar la mantequilla de CBD

Tu mantequilla de Marrakech con CBD ya está lista para disfrutar o usar en tus recetas. Guárdala en un frasco hermético, protegida de la luz y la humedad. Se conserva unas dos semanas en el refrigerador o hasta tres meses en el congelador.

Esta mantequilla infusionada se integra fácilmente en recetas dulces o saladas: pasteles, bizcochos, salsas, verduras o postres. También puedes disfrutarla simplemente untada en una tostada caliente o disuelta en una bebida caliente para una infusión suave y bien asimilada.

Consejo del chef CBDPC

Añade siempre tu mantequilla de CBD al final de la cocción o a fuego suave. Una temperatura demasiado alta podría alterar los efectos del cannabidiol y la riqueza aromática de tu preparación.

¿Por qué se llama mantequilla de Marrakech?

La mantequilla de Marrakech debe su nombre a la ciudad marroquí donde esta preparación se popularizó en las décadas de 1960 y 1970. En sus orígenes, se elaboraba con cannabis local y se utilizaba en la cocina tradicional para preparar platos y dulces con efectos psicoactivos.

Marrakech, siendo un centro histórico del comercio del cáñamo y un destino popular entre los viajeros en busca de experiencias exóticas, dio su nombre a esta receta emblemática que se extendió rápidamente por el mundo.

Antaño símbolo de evasión, la famosa mantequilla infusionada regresa hoy en una versión moderna, suave y legal. Se sustituye el cannabis rico en THC por cáñamo con cannabidiol, para una experiencia relajante y gourmet, sin efectos psicoactivos.